“La Fraternidad es la clave para América Latina”

En el marco del Seminario de Acciones Sociales del ConoSur se realizó un análisis del panorama social en Latinoamérica, basado en un completo informe de la CEPAL, en el que se distinguieron los puntos fuertes y débiles de la acción social en el continente. 

CAMBIO DE PARADIGMA SOCIAL

El manejo de recursos para proyectos sociales ha transitado un cambio de paradigma, ya que antes se realizaba más bien una actividad altruista espontánea, pero sin estrategia de base y sin posibilidad de evaluación del impacto de las donaciones  que se hacían. Ahora, en cambio, se busca introducir parámetros de inversión y de impacto a largo plazo. Ya no se habla de donaciones sino de “inversiones sociales”.

EL ORIGEN DE LA DESIGUALDAD EN LATINOAMÉRICA

El extenso diagnóstico que se realizó acerca de la realidad Latinoamericana está basado en un informe publicado por la CEPAL, Comisión Económica para América Latina (ONU): “Cohesión social, inclusión y sentido de pertenenciaen américa latina”.  Informe clave que profundiza en los aspectos culturales que intervienen en la falta de desarrollo y oportunidades en AmLat.

En síntesis, el informe explica que uno de los mayores problemas en América Latina es el deterioro de los lazos de cohesión social generado por dos tipos de causas: objetivas y subjetivas. Las causas objetivas son más clásicas: pobreza, marginalidad, exclusión y desigualdad, este último es el rasgo que caracteriza especialmente al continente.

En segundo lugar las causas subjetivas son aquellos elementos culturales que hacen persistente a la desigualdad, ya que pese al crecimiento económico los parámetros de inequidad no se reducen, existe una desigualdad resistente al cambio. Las causas subjetivas son los factores culturales: la historia de Latinoamérica que ha naturalizado esa inequidad.

El Informe de la CEPAL incluso señaló que un factor más grave que la desigualdad es la indiferencia frente a ella: cuando no se la problematiza y se la vive con total naturalidad.

El informe reclama y afirma que “ninguna política que atienda las causas objetivas será verdaderamente efectiva a menos que atienda también las causas subjetivas.” Lo que reclama el informe es una verdadera “revolución cultural”.

Lo decepcionante es que desde el 2007 ningún gobierno ha respondido ni citado a este informe. Es posible que el escenario de conflictividad impida que se planeen objetivos comunes.

CAMINO SE HACE AL ANDAR

Sobre este diagnóstico podemos plantear nuestra estrategia de acción como organización social. Para ello debemos asumir dos caminos: trabajar sobre las causas objetivas  y trabajar sobre las causas subjetivas.

Una de las mejores maneras de atacar las causas objetivas es a través de la generación de empleo. Ya que el trabajo es eje de articulación de la vida personal, familiar, social y comunitaria. El Informe de la CEPAL indica que el miedo fundamental del latinoamericano no es la inseguridad, como muchos creerían, sino el miedo a perder el empleo. Es más, la inseguridad y la delincuencia tienen que ver precisamente con ese miedo. Hay que concebir al trabajo como factor objetivo del cambio social.

CAMBIANDO EL PARADIGMA

Para desterrar la desigualdad estructural hay que atacar las causas subjetivas: trabajar contra los factores culturales que conducen al individualismo, al “sálvense quien pueda”, a las soluciones biográficas y no sociales.

El Individualismo es el gran fracaso de la modernidad: la ilusión de que uno por sí solo puede salvarse. Necesitamos poder encontrar fundamento para una nueva historia que nos permita reconocernos como miembros de una misma comunidad, reconstruyendo el sentido de pertenencia.

No muchas ONGs en Latinoamérica tienen por debajo un sustrato cultural, ideológico, espiritual que las haga portadoras de ese nuevo paradigma que la realidad reclama. El deterioro del alcance de su actividad en los últimos años tiene que ver con esa carencia.

El camino de superación en América Latina tiene que venir de la mano con una nueva idea de comunión entre los latinoamericanos.

Jorge Cela,  presidente de la CEPAL de América Latina, terminó la conferencia de presentación del informe diciendo: “La Fraternidad es la clave para América Latina; la palabra más significativa para el continente latinoamericano es: Fraternidad”